Para quitar un poco de seriedad a un tono oscuro nada como un poco de sparkling en forma de esmalte de arena. He aquí este desenfadado duo con el 886 de Dior (ese esmalte que es más bonito en el bote que en la uña...) con el Sugar Matt en 645 de Kiko en el anular.
Con estas temperaturas menos agobiantes, el cuerpo empieza a pedir un poco de otoño, así que le hemos dado un pelín, para que no se acostumbre mucho.
Hace tiempo que veo en muchos vídeos, blogs y páginas web el famoso cuestionario para crear intimidad, que aquí se hizo boom por el programa de Pablo Motos. Unos lo llaman intimidad acelerada, otros lo llaman "enamoramiento"... todos sabemos que no es ni lo uno ni lo otro.
Al ser humano actual se le ha vendido que tiene que dejar de perder el tiempo y focalizar y para ello debe hacer un uso más eficaz de su tiempo y eso implica, en muchas ocasiones, una clara discriminación por evitar lo malo, centrarse en lo bueno, lo cual no es malo pero evitando lo más posible lo que no aporte nada. Y todo aporta todo, porque genera experiencia.
En el vídeo que os he linkado del Hormiguero te venden como fantástico saltarte 10 citas y concentrarlas en una sola, que no deja de ser como tomarse un té con el conejo blanco de Alicia: un estrés de tanta información, porque a veces recibir tanta información a tanto nivel de alguien a quien acabas de conocer es un palo. Porque lo bueno/ malo de las 10 citas es que te aportan un sublenguaje gestual que no sólo te da la palabras. Quien te dice que de esas 36 preguntas te estan contestando todas de manera honesta, sincera y no de una manera políticamente correcta?
Reducir las citas es reducir la experiencia. Prometí hacer una incursión en las redes y en las páginas de contactos y comentar sobre eso, una incursión que nunca se llegó a producir, porque realmente me producía dejadez las experiencias compartidas: desde que hay otro lenguaje implícito en estas páginas, mensajes de "hola, se me ha pasado el arroz" o "soy firme defensor de la pesca de arrastre" en los mensajes de presentación, hasta muchas fotos de lo que un amigo mío denomina "filetes empanados" (dícese de personas que se arreglan un montón para la foto, pero que en la vida real tampoco son taaaan explosivas). Las experiencias que compartió la gente conmigo sobre el uso de estas páginas fueron desde muy positivas, que las hay ("conseguí una pareja de larga duración, con un buen trabajo y un físico espectacular, sólo que la cosa no funcionó y pasados unos años, lo dejamos, pero fue genial, porque he ganado un buen amigo"), hasta "tenía una vida paralela y me dejó, no sólo una deuda importante, sino mucho dolor emocional". Los comentarios sobre las redes siguen siendo más negativos que positivos y muchos de ellos se centran en fijarse en el físico y establecer contactos sexuales (respetable, pero obviamente crear así intimidad es complejo, cuando es lo que buscas). Parece que por eso reducir el tiempo de cita y aumentar la intensidad del encuentro es un factor considerado como "deseable". Pero claro, quién te dice que esto no es una prolongación de lo que has encontrado en internet: que alguien te intente liar para obtener cosas de tí que no facilitarías si no fuera en un entorno de mayor estabilidad relacional?
El problema es que a veces la chispa no surge con 10 citas. De hecho veis el vídeo y hay gente que ni con las 36 preguntas crea vínculo suficiente para establecer una relación amorosa. Primero porque las relaciones tienen un tempo, las personas necesitan un ritmo para establecer su grado de intimidad con los demás, hay gente que es más rápida y confiada y gente que es más celosa de su intimidad, no por desconfianza, a veces simplemente por timidez, no a todo el mundo le tienes que mostrar ciertas facetas de tu vida. No respetar los tempos y espacios del otro supone llevar al otro a una situación de malestar importante: violas su intimidad y eso es lo opuesto a lo buscado. En el vídeo te venden que es que no escuchamos a los demás, que no nos abrimos, pero es que tampoco podemos compartir todo con todo el mundo. Puede que sea el problema ese: hay gente que pretenden aferrarse a la gente que le brinda un oído, pero eso no es amor, sino los psicólogos tendrían clubs de fans. También hay gente que no se abre porque ve cosas que le hacen ser más reservado, cada experiencia te da una información valiosa, a saber, cumplimentar 36 preguntas sólo hace escuchar una vida y soltar una experiencia que no tiene porque ser una situación que siempre quieras compartir con todos tus ligues en la primera cita.
Si se marca una media de 10 es porque el primer día estas nervioso, el segundo se establece otro rollo y se va a evolucionando con preguntas para cribar (una de mis amigas pregunta por "tu tipo de fuente de word favorita", yo soy más de "superhéroe favorito", creedme, dice mucho). En 10 días pueden pasar un montón de momentos bonitos que llenen la historia de significado, o todo lo contrario, pueden pasar cosas que sin ser desagradables, generen una perspectiva de que esa no es la persona con la que te ves pasando la vida.
Las 10 citas permiten pensar en lo ocurrido en cada una, meditar, echar de menos o no al otro, diseccionar y revivir mentalmente todo, dar valor a lo ocurrido, cuando ocurre mucho, como condesar 10 citas en 1, te pierdes mucho, porque el nivel de atención baja con el tiempo, por mero desgaste. Y si la persona merece la pena, no quieres eso, y sino te causa interés, quieres tener razones que te saquen de dudas. Algunas cosas merecen la inversión de tiempo en ellas, aunque como experimento sociológico, es entretenido saber que los humanos somos tan fácilmente vinculables.
Yo cuando lo vi en el hormiguero aluciné, estoy de acuerdo contigo en muchas cosas. Pienso que no tiene nada que ver una serie de citas "normales" (si es que se puede llamar normal a una cita), se están encontrando en un ambiente controlado, incluso manipulado. A parte, ¿quien te dice que esa persona que no has visto nunca está siendo sincera contigo? Me resulta muy extraño que tanta gente se sintiera, vamos a llamarlo así, vinculada. Me lo podría creer en jovencitos, pero llega un momento que tenemos una serie de experiencias a la espalda que nos pone, como mínimo, a la defensiva.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho el post.
Un abrazo!
Es que tomarse en serio algo que saquen en el hormiguero es como leer una página de esas viral que hay por la red y creer que son noticias. (Lo siento, no puedo con Motos y compañía).
ResponderEliminarMe ha encantado tu manicura, a mi también me va pidiendo otoño el cuerpo.
BESOS!
Los experimentos sociológicos son eso: experimentos, sucesos manipulados en un entorno controlado. Difícilmente, llevados a una realidad exterior, funcionan igual.
ResponderEliminarPon a esas dos personas, simplemente, haciendo lo mismo en una cafetería normal, y verás que la cosa cambia: la temperatura, el ruido, la pareja que pasa y se tropieza on la silla, el camarero, alguien que te conoce ty te saluda,...sería totalmente diferente porque habría derivaciones de atención, y mucha más comunicación gestual, y más información verídica.
A mi el tema de los sentimientos enlatados es algo que siempre me ha dado repelús. Cuando te preparan algo tan encorsetado, pierde la gracia.
Besos!
Es que el amor no tienen nada que ver ni con diez citas ni con 36 preguntas. Ahí queda eso.
ResponderEliminar¡Hola! Bonito blog, buen trabajo! Estoy volviendo a darle caña a mi blog, quisiera que le echaras un vistazo y recibir tu opinión sobre él. Feliz día, gracias por leerme ♥ Te espero en: lucymakeupbeauty.blogspot.com.es ♥ #crueltyfree
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