Oiga, que no me acordaba que tenía un bote entero lleno de estrellitas rojas y relámpagos maravillosos y en un momento hipervikingo de la vida lo he usado con una laca que se va a ir pronto que es mi adorada 299 de Kiko, la famosa Renault 11, un azul verdoso como con purpurina. No la encontraré nunca tan bonita, lo sé, porque laca que me gusta, laca que dejan de hacer. ESTO NO ES SERIO.
A ver si me pongo ya con lo de la dominación mundial, porque este tipo de cosas me resultan molestas.
Para empezar vamos a hacer un poco de autobombo, dos colaboraciones que he tenido, la primera fue este Battle Royal de Chicas Bond que levantó polémica antes de empezar, porque se pensaba que la belleza primaría sobre otros elementos de los personajes (el resultado os sorprenderá) y la verdad es que las pelis Bond, si algo tienen en común, es que son fieles hijas de su tiempo. Como me fuí de boda, con las prisas no os lo comenté la semana pasada, pero si le queréis echar un vistazo, está divertido y salen también Diana y Marlow, además de Paco Fox que es el que monta el sarao. Creo que quedó salado al menos, así que echadle un vistazo si os hace ilusión. Y la otra, también de mano de Paco Fox y Vicisitud fue este post sobre teorías conspiranoicas, que está funcionando sorprendentemente bien.
Quiero agradecer desde aquí a todas las personas que han difundido el contenido, que me han pasado los datos del Menéame con alegría por los buenos resultados, que me han comunicado que han disfrutado del post y obviamente a Paco por echarme una manilla con el post, con su infinita paciencia e ingenio, y darme espacio para soltar mis chorradas escribir en su espacio.
De todos modos, como siempre, no os toméis muy en serio las tonterías que digo, al fin y al cabo, es por las risas, que son muy necesarias. De hecho, no es un post serio, el post más serio que hice en Vicisitud y Sordidez fue este, porque anda que no he escuchado mierdas tributo.
Por cierto, pronto habrá más material, tengo que aprovechar para disfrutar de las colaboraciones antes de que mi agenda se pete con otros planes. Y no, que ya lo ha comentado alguien, no me voy a abrir un canal de Twitch ni un podcast (al menos, no de momento, quién sabe si un día se me va la pinza del todo), porque no creo tener el talento suficiente como para llevarlo a buen puerto, pero gracias por el interés y por la fe de pensar que sí lo tengo, sois amor.
Hoy quería hablar de un tema potinguista por el que algunas personas me preguntan y creo que es interesante sacarlo a colación, sobre todo cuando se usan productos abundantes en extractos naturales. Como sabéis una vez al mes saco un post de comprados y gastados, que unifica primeras impresiones con el producto terminado y mi experiencia global con dicho producto. Me han llegado comentarios sobre que podría poner uno solo de gastados, pero creo que es importante ver el desarrollo de un producto en piel.
La renovación celular tiene un ciclo aproximado de 28 días, dependiendo de la persona y la piel, pero más o menos esa es la media. Y hay que tener en cuenta los ingredientes, más que las marcas, que es una cosa que creo que toda la comunidad potinguera de Blogger (al menos la que yo conozco), tiene como criterio unificado... siempre hay excepciones, lógicamente, excepciones a las que no pertenezco dado que me veo incapaz de comprar un cosmético ya sin mirar el etiquetado de ingredientes.
Los ingredientes nos pueden marcar no sólo los conservantes y químicos del producto, sino también los componentes que funcionan como "catalizadores" (es decir, que modifican la velocidad de reacción) de un producto en piel o bien elementos que la sensibilizan de manera potencial.
Hay personas que hacen la compra de un producto y lo promocionan uno por uno, con posts muy interesantes que te dan información de partida que puede hacer que te decidas o no a comprar dicho producto, no obstante el "viaje" que vives durante el uso de dicha química, aunque se vea condicionada por mil cosas, es siempre interesante de tener en cuenta. Por eso son fan de los blogs que hablan de las primeras impresiones y de las reviews una vez gastado el producto.
No es la primera vez que compro algo y ese algo al principio me encanta y a las dos semanas, lo que era un enamoramiento estupendo e idílico, se convierte poco menos que en la relación de ciertas estrellas de Holywood: estéticamente estupenda, pero tóxica total. Que sí, que puede haber sido un periodo de nervios, que puedo tener las hormonas más revueltas que el final de un capítulo de What If, el frío, la sequedad, que me puedo quemar con el sol... sin embargo, si algo no va bien no insistes. Todos buscamos productos todo terreno: que se adapten a nuestra vida en general (vacuna covid incluida, que menudo baile nos está causando a algunas).
Así mismo, hay productos que empiezan muy mal y crees que va a ir a la basura de cabeza pero resulta que no, que tu piel experimenta un aclimatamiento al producto y al final, en un deus ex machinote sin precedentes, tu piel resurge renovada cual ave fénix de su sofrito, o que te vienen sorprendentemente bien en momentos de crisis: anda que no le hemos encontrado a cosas encantadoras de nuestros cajones que no nos llamaban la atención esta pandemia, o mejor, en esta Filomena! Ay amiga, que esa crema grasienta anda que no ha salvado codos, talones, manos, nariz, o lo que sea... Por ejemplo. De hecho, rara es la persona que tiene la misma rutina facial- corporal en invierno y verano y le va bien. Es más, ahora que lo pienso, no conozco a nadie.
En este segundo punto de productos que empieza muy mal pero terminan sorprendentemente bien, cual película de catástrofes, está el megamix de productos que compras con una finalidad y por arte de magia, no terminan siendo usados para lo que se adquirieron porque les encuentras una función mucho mejor (al menos para tí). Anda que no hemos visto labiales convertidos en coloretes, lápices de cejas convertidos en lápices de labios, coloretes que ahora son sombras, cremas de cara que funcionan sorprendentemente mejor en manos que en el rostro... Sí, todavía echo de menos la crema de manos del Lidl de extracto de caléndula, ains. Qué salvavidas de piel irritada he perdido.
Los expertos aún así determinan que hay cosméticos más rápidos en su acción que otros: los desmaquillantes por ejemplo son de los productos más inmediatos, porque su acción es la que es. O te quitan bien el pote o no, es lo que hay. Además, se ve rápido si irrita, si genera granitos, si da molestias en los ojos... La cosa es simple, en una semana, a lo sumo, un desmaquillante da el cantazo sobre su calidad (aunque si no funciona, siempre lo puedes guardar para desmaquillar pestañas postizas, por ejemplo, que es lo que hago con los productos con mucho alcohol. También hay quien lo usa para limpieza de brochas, por poner otro uso alternativo). Los tónicos, según expertos, también dan el cantazo rápido. Creo que es conocida mi lucha por encontrar tónicos que no me saquen espinillas, que es un poco la misma que con los productos que dicen controlar el sebo facial y lo único que hacen es bloquear el poro (que sinceramente, ya ni los uso, porque no creo en ninguno, dado que ninguno me ha ido bien, y en esto incluyo productos de alta gama. NI UNO, SEÑORA).
Una buena hidratante da la campanada a lo Kim Kardashian, según entra. Es así, sobre todo en pieles secas, si te relaja la sequedad al momento, es amiga. Así mismo se nota igual en una piel mixta o grasa, cuando es muy grasienta lo notas y vas todo el día con una incomodidad soportable y, al mismo tiempo, torturante (ya os hablaré del último solar "no graso" que me he compré... no es graso, pero pollo frito, oiga). Entra en los cosméticos que son de rápida acción.
Disclamer sobre ciertos compuestos: el ácido hialurónico es una esponja de humedad en la piel, así que es un componente que vas a notar en seguida si lo que buscas es tener una buena crema hidratante. El retinol, sin embargo, como tratante de arruguitas que es necesita al menos varias semanas de calentamiento para ver mejoras. Es un componente lento, pero efectivo, así que hay que ser paciente.
Los serums, sin embargo, tienen una acción más lenta que puede necesitar hasta un mes para comprobar su valía en batalla, sobre todo si tienen gran parte de su composición constituida por elementos naturales, que suelen tener una acción más lenta si cabe. En esta misma situación está todo cosmético que trate la pigmentación o las manchas, son MUY lentos. También en el equipo de los lentos están todos los cosméticos tratantes del acné, es algo que no mejora de un día para otro, pero más o menos en un ciclo de 28 días puedes ver mejora de tu situación, si la hay. Creeme que si no hay mejora sí que lo vas a notar y mucho.
De aquí que me guste dar la opinión al principio y al final, sobretodo en cosmética de tratamiento. La de color a veces tiene una pizca de tratamiento y, sinceramente, rara vez he visto una mejora que no se vaya después del desmaquillado, la verdad, aunque sí recuerdo una máscara de pestañas de Kiko que no me fue nada mal.
Creo que este post, para los nuevos lectores que estáis entrando a cotillear del potingueo en general, os puede ayudar para ver si os han timado, o es que la crema que os han vendido está cargando como el windows con las actualizaciones. Los post de comprados y gastados van a seguir con la misma fórmula y espero que este disclamer sobre la acción de potingues en general, os haga verlos desde un punto de vista diferente. Para las potingueras experimentadas, espero que este post les sirva, primero para ver que su trabajo es valorado y útil, porque realmente da información a las personas que buscamos una crítica real (porque hay mucha crítica bajo pago y aquí hay cero sorprendidos) y nos ayuda a aprender, que es lo bonito de esta comunidad, y por otro lado, para seguir la estela de un post muy interesante que hizo Gadi el otro día (os lo linko aquí) sobre la publicidad engañosa y tóxica de ciertos cosméticos, sobre como nos hacen abrazar conceptos imposibles que, ni es bueno que tengamos, ni son consecuentes con la acción real de un producto.
Espero que esto sirva para aclarar el porqué de esos post, que sinceramente, creo que pueden aportar algo al tema de los potis.
Lo primero: me encanta ese color de Kiko, así que ahora fijo que lo retiran porque soy gafe 😅. Lo segundo: gracias por este post, es muy útil, como todo el blog, sobre todo para las ignorantes totales en temas de potingues como yo, y te agradezco que te tomes el trabajo de explicarnos estas cosas y tengas tanta constancia. Lo tercero: tu último post de Visicitud y Sordidez me ha encantado, y ese sobre versiones cutres de los Beatles también mola. Y ¡sí!, yo también veía mucho a ese guitarrista de Tribunal, es cojonudo.
ResponderEliminarA mi me gustan mucho los blogs que son prudentes en el sentido en que comentas, que contemplan el paso del tiempo en el uso de un cosmético, porque como bien dices, las cosas que empiezan yendo bien, se pueden torcer en semanas, y viceversa.
ResponderEliminarMuchas gracias por la mención y preciosa manicura.
Besitos.
Que maravilla de laca de uñas
ResponderEliminarMe ha encantado el post, y agradezco la pate que me toca.
ResponderEliminarSobre los tónicos, no sé si has probado los de Ziaja, pero el de Caléndula de Ziaja, pese a que dije que parecía que no hacía gran cosa, chica, que lo echo de menos. Es calmante e hidratante, no graso, no alcohol, todo ok.
Si es más para controlar sebo, la línea de pepino de Ziaja funciona muy bien y no es excesivamente astringente, aunque si lo que quieres es controlar brotes, lo combinaría con el azul de la línea de Ziaja.
Y no, Ziaja no me paga un céntimo, pero tengo la suerte de haber podido probar muchos de sus productos y me parecen fantasía. De hecho, compro para mí muchísimas reposiciones de esta marca.
Besos!
Tus posts de terminados y comprados son mis favoritos del blog, no cambies y sigue así siempre. Y esa manicura me parece de las más bonitas que has publicado por aquí. Me obnubila y enamora el alma.
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