Look de uñas: metallic fantasy army y el día contra la violencia de género

 Aunque la luz no ayude quedan muy bonitos estos tonos juntos: el verde es el 392 de Kiko, regalo de Angie y el morado duocromo es el Where's the party de essence. y el de Kiko es superbrillante la verdad, pero no sé porque aunque hace horas que me pinté las uñas, con las sabanas se queda como rallado y seca bien, ojo, pero pasan estas cosas.

Primero de todo quiero agradecer todos los comentarios al post de ayer, porque son todos muy interesantes y creo que reflejan muy bien una realidad alimenticia de la que no se habla: hay nuevas necesidades alimenticias que si se cumplen son a un precio desorbitado o te timan con que todo es hipersano, hasta que lees la letra pequeña. Al final para comprar una mostaza (por ejemplo) vas con el mismo cuidado que cuando firmas algo del banco.

El viernes ha sido el día contra la violencia de género: voy a volver a explicar porque la ONU considera la violencia de género un problema estructural social porque siempre está el cuñadísimo que dice que para cuando el día contra la violencia a los hombres, que hay que llamarlo violencia familiar o cualquier cuñadismo. 

La violencia de género es cualquier agresión por el hecho de que hay una sociedad desigual donde la mujer vale menos. Puede ser una sociedad aparentemente democrática y con igualdad de derechos, pero cuando ves que hay que hacer cuotas para que una mujer con la misma educación llegue a los mismos puestos que un hombre, no es igualdad. Cuando te preguntan si tienes hijos en una entrevista laboral y a un hombre no, no es igualdad. Cuando te pagan menos por el mismo trabajo desarrollado, no es igualdad. Y desde luego cuando te dicen que si tienes determinadas conductas, estas buscando una agresión, no es igualdad.

Y ahí vamos, una desigualdad de género se sustenta en que vales menos y por tanto, los demás tienen el poder de menospreciarte, poseerte, tomar decisiones por ti, ningunearte, cosificarte, decidir sobre todo lo que te competa sin escucharte y miles de cosas que sustentan esa relación en la que tú, por ser mujer, eres menos: cuando una mujer es agredida y viene el típico comentario de "algo habrá hecho, porque sino, no la pegarían" o "al final no denunciará porque estan idiotas y parece que les molan que les peguen" no se entiende el problema que supone de despersonalización que hay previo, donde la mujer pierde toda identidad y autoestima propias. Y al final se criminaliza a la víctima.

Es por ello que la violencia de género no es familiar, porque si alguien me agrede porque soy mujer, porque puede, porque se escuda en como me visto, o maquillo, o hablo, o pienso, o en que le apetece y puede, no es por ser familia, es porque se cree con el derecho que le da que haya una sociedad que cuando yo soy la agredida me pregunta si he hecho lo posible para evitar la agresión, porque logicamente todas las chicas queremos ser víctimas.

Pero claro, todos sabemos que los hombres guapos, aunque usen drogas, no necesitan violar para tener sexo, a pesar de que 1 de cada 3 hombres violarían a una chica si la violación no tuviese consecuencias penales, simplemente morales, incluso las perseguimos por denunciar a pobres chicos que las han violado, porque la culpa es de ellas por ir borrachas o estar donde no deben. Son las mujeres que no hacen lo que pueden para protegerse y por eso este año llevamos 39 víctimas sólo en España. En la primera encuesta Alemana sobre el número de víctimas tenemos que los alemanes contaron en el 2015 con 331 mujeres!  Pero otros países nordicos como Suecia, Dinamarca, Finlandia tienen índices más altos todavía. Cualquier mujer es una víctima potencial. Podría pasarte a ti, tengas pareja o no, ese es el peligro.

Y esa es otra razón por la que sí existe una estructura social que sostiene la violencia de género como fenómeno mundial.

A pequeña escala las palabras y los discursos son importantes y más entre mujeres, hay que evitar el slut- shaming como salen en los tags de twitter o la manía de llamar puta a alguien por tener un comportamiento que no nos gusta como posar ligera de ropa, tener relaciones sexuales que son aprobadas, tener un comportamiento sexual desinhibido o incluso criticar la ropa que lleva. Incluso cuando las mujeres son víctimas de contenido sexual publicado sin su consentimiento se da el slut shaming, como se vió en el caso de la joven italiana que se suicidó porque su ex publicó un vídeo sin su consentimiento. O los jugadores del Eibar que pidieron perdón a todos menos a la chica que tuvo relaciones con ellos por un vídeo que se "filtró". Pero sin ser famosos, el colectivo de las chicas cosplayeras es uno de los más castigados, con personas que las fotografían sin su permiso, o las tachan de putas por ir vestidas de ciertos personajes... Incluso en Halloween ya hemos adquirido los términos de disfraces "putilla"cuando alguien va con poca ropa. Y todo esto refuerza la cultura de la violación y con ello la desigualdad.

Un ejemplo no muy lejano, y no voy a mentar a la blogger, pero ella sabe quién es, ha sido este año en un blog donde a una compañera nuestra ha recibido la crítica del Anónimo del año por el término "rojo puta" (aunque creo que usó más bien el término rojo meretriz portuaria, si mal no recuerdo) para describir un color que llevaba nuestra amiga y compañera. Pues eso también es slut shaming. Y machismo. Y mala educación, porque estamos en unas sociedad en la que por tener un blog o un vlog como "te expones a los medios se puede opinar de ti". Claro, pues cuando salgas a la calle te llamo "chupacharcos" porque como te expones a la vía pública... (sí, para mí tiene la misma lógica, que viene a ser cero).

Claro que sí, lumbreras!

La hermandad de gente que quiere un mundo igualitario y feminista tiene que ser más fuerte que los que quieren mantener el status quo de violencia y poder sobre las mujeres. Pensad en ello.