miércoles, 2 de junio de 2010

Un día en la vida de Explosión Girl a lo Lomana



Me levanto, el baño para mi sola, ya los obreros han terminado con las obras y no tengo la necesidad imperiosa de correr hacia el baño a por la ducha como si no hubiese un mañana.

Tras un desayuno con los bollos más chocolateados que encuentro (un capricho lo tiene cualquiera), me arreglo y voy con paso estiloso a mi tren particular, donde mi repartidora de prensa no esta... mañana la despediré.

El metro viene puntual, y aunque puedo, decido no sentarme, hasta que hago trasbordo (señora, deje paso a la gente con caché) y me siento en la linea 6 donde disfruto del programa conversaciones con el vampiro, que no escuché el viernes por estar agotada al mismo tiempo que tener que madrugar por los obreros al día siguiente.

Bajo del metro y decido entrar en mi despacho, veo un obrero en la ventana poniendo unos recubrimientos estupendos en las tuberias, cerraría harta de obreros, pero es que este está colgado de un arnés y está bueno... asi que simplemente le ignoro hasta que me aburra y me de por mirarle...

Como soy una profesional, esa circunstancia no se da, y subo a hacerme un tratamiento de belleza tras comprobar que mi pc no funciona y el de la sala de reuniones tampoco... qué ofrenta! hacerme eso a mi! Necesito un descanso.

Miniyo yogurín me mira preocupado: "mucho estrés en tu piel" parece pensar, y decide hacerme un tratamiento completo de mascarilla de yogur natural (azucarado) que hidrate y regenere mi piel... y mi ropa... pero como el experto es él, no le digo ni mú. A los estilistas no se les chista.

La cosa es que decido bajar a comer, tengo una reunión importante de trabajo. El menú es:

-Lentejuelas de la huerta guisadas a la manzana de tierra (lentejas guisadas)
-Mixtura de canónigos, lechuga y granos varios (ensalada de maiz y tomate, lechuga y canónigos).
- Bastones franceses rebozados (croquetas de jamón caseras)
-Especialidades de Palos a la Pasteur (fresas con yogur)

Tras disfrutar del menú, subo a la reunión, una reunión social donde prima el buen gusto, la organización y el respeto al turno de palabra (donde observo que para tres tios que hay, dos miran el tirante descubierto por mi camiseta de mi sujetador... debo una disculpa al tio del arnés):



Tras la reunión, decido acompañar a una compañera a pedir cita para el médico, resulta que yo también puedo ir a los especialistas de dicho centro. Y todo ello rodeadas de las casas más lujosas del lugar.

Decido hacer un par de informes, visitar a unos pequeños e ir a casa.

Todo muy ordenado, no?

Pues dentro tengo un cacao tremendo, no sé si dejar el trabajo, mis opos han salido, pero si las acepto y dejo el trabajo salgo de la bolsa que no se abrirá hasta N... no sé que hacer muy bien. De momento tanteo a la chica a la que suplo, me da que se va a coger unas vacaciones pagadas, pero bueno...

En fin. De momento hoy he mandado un mail a Zink cosmetics para saber si los culpables de que mi regalo no llegue son ellos que se les ha olvidado, aduanas o los de Correos, porque quiero ser precisa a la hora de cagarme en la madre de alguien.

La parte ultrapositivisima es que a una de nuestras miniyos la van a adoptar y como la adapatación a  la convivencia está siendo estupenda  se irá estos dias y otros maxiyos han arreglado su situación y se han llevado a sus miniyos. Estamos muy contentos, la finalidad de este centro es que los miniyos nos den un beso y se vayan felices y contentos a su minihogar.

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