Desde la semana pasada estoy intentando evitar hacer un post sobre rupturas, porque bueno, no dejan de ser duelos y son cosas personales: cada uno sobrelleva su duelo como buenamente puede. Pero dado que últimamente hay varios en mi entorno, y que el último post de este tipo parece tu tuvo buena acogida y ayudo a bastante gente, he decidido hacer un post sobre hechos probados por la psicología de las que cosas que van bien y las cosas que van mal para superar o, al menos, sobrellevar el trago con cierta templanza. No es para seguirlos a rajatabla, es para que os hagan pensar y cada uno lo aplique, o no, a su realidad, según le convenga. He hecho mezcolanza con lo que yo he podido hacer algunas veces y me ha ayudado de veras, pero esto es como el bizcocho de yogur, cada uno en su casa tiene su receta.
Lo primero que me gustaría dejar claro, siempre que hablo de estas cosas, que creo que alguna vez lo habré dicho es que la psicología no es una ciencia basada en el "yo creo/ yo opino/ yo pienso", sino que está basada en hechos científicos y en la investigación, tanto cuantitativa (datos numéricos) como cualitativa (datos sobre las cualidades de la realidad) de las cosas, basados en métodos de ciencias como la biología, matemáticas, química... así que si alguien os viene con lo de "tú estas con la depre" o "tú tienes el síndrome de..." sonreir y asentid, pero internamente, ni caso le hagáis porque este país está lleno de listos. Las cosas que son ciencia las veréis claramente, mis ideas lolailo también las notaréis.
1.- Date permiso para sentirte mal. Tanto si dejas como si te dejan, no es fácil, implica que una relación en la que pusiste esfuerzo e ilusión se ha ido al traste y eso siempre es un derrota emocional. Dicen la mayor parte de modelos de tratamiento de trabajo social y psicología que si tienes que llorar, pues lloras, si te va más cabrearte, pues te cabreas, sé sincero con lo que sientes, pero también específico: hablamos demasiado de depresión y a veces es una profunda tristeza. Cuanto más determines tus sentimientos, más fácil encararlos.
2.- Cuidadin con el psicodrama. Es normal estar triste, es normal que te cueste empezar y es supernormal echar a alguien de menos. Lo que no es normal es estar en el segundo mes de ruptura todavía llorando porque te ha dejado como si fuese el primer día. Y no es normal porque emocionalmente tienes que moverte, no se puede quedar uno en el mismo sitio. Sociológicamente, el papel de víctima, como todos los roles sociales, tiene unos "privilegios sociales": atención externa, cariño, comprensión... pero si abusas, la gente te los retirará como vinieron, no es su obligación tener una relación paternalista contigo, así que no se lo eches a la cara después. A todos nos dejan, y que te dejen es una basura, pero se supera, con ayuda, pero con menos drama. Frases como "no voy a poder superar esto nunca" no sólo no te ayudan sino que te dan una realidad inviable: lo vas a superar. Esto es lo que en sociología se llama "profecía autocumplida", un ejemplo claro es el niño que se sube a un escalón y la madre le dice "bájate que te vas a caer, que te caes, niño bájate, que te vas a caer..." y el niño se cae. Sin la madre, seguramente el niño podría caerse o no o entrar al circo del sol tras hacer un mortal salida carpada, pero con esos mensajes negativos, inconscientemente entiende que su "misión" es caerse... y se cae. Si te dices que no lo vas a superar, te autoboicoteas, así que búscate una frase más positiva como "yo puedo superar esto", quizá hoy no te la creas, pero al final te funcionará, porque tú, como todos, quieres ser feliz y puedes serlo.
3.- El mes de luto: busca tu espacio y crea nuevas dinámicas sanas. Lo admito, soy una persona bastante "especial" con su espacio personal a nivel emocional. Me ha costado darme cuenta, pero aquí estoy. Así que desde la primera ruptura hago la muy sana costumbre de pedirle a mis ex que durante un mes no hablemos con el otro a menos que el mundo peligre: el mes de luto. En ese mes, estas hecha mierda y el otro no tiene porqué saberlo. Si se ha tomado la decisión de terminar, es por alguna razón de peso, así que es mejor crear una nueva realidad cuando estás más preocupada por llorar y deshacerte de la tristeza que hacerlo después, porque el desapego que fomentas, precisamente te crea la oportunidad de crear dinámicas a las que acostumbrarse sin él, ya que vas a tener que cambiar dinámicas sí o sí, pues lo haces de raiz y sin miramientos. Ojo, que no es fácil, pero es mucho más fácil hacerlo así que estar pendiente de lo que hace el otro. De la misma manera durante el mes de luto no te enrollas con otras personas (rollo incluye del besuqueo adolescente para arriba), evitas que crees lazos de dependencia por la pena con pagafantas (siempre los hay), que no dejan de ser personas manipulativas que realmente no te quieren, porque si lo hicieran, te esperarían y no te harían chantaje emocional. Este mes de luto puedes pasarlo con algún "amig@ tutor" que te anime en los momentos más bajos y te felicite cuando lo llevas muy bien. Varias personas de mi entorno lo han probado y les ha costado, pero la perspectiva que tienen al terminar el mes es de una mayor calma mental y un orden en sus ideas importante.
4.- Dieta de redes sociales. En la actualidad hacer el mes de luto y separación con las redes sociales es de una dificultad brutal. Tengo varias amigas que han pedido a sus amigos que, por favor, les cambien las contraseñas de sus fb, twitter, instagram... para no tener acceso al de sus ex. Lo cual me parece sano, sobretodo si queréis salvar la amistad. Si no, bórrale tú primero, es tontería esperar a que te borre el otro, las cosas como son. Evita stalkeos y comidas de tarro innecesarias. Esto también depende un poco de la fuerza de voluntad y coherencia interna de cada uno. Seamos sinceros: si ves fotos de tu ex en una fiesta: vas a pensar que va de tranqui o que va a cien a celebrar la ruptura? Si le ves con otra persona, vas a pensar que es una amiga o un ligue? Pues si la respuesta no es positiva, mejor que no lo veas, emocionalmente no te hace parecer más fuerte ni más madura. Evítate negatividad si sabes que te cuesta. Ah, y si censuras, vuélvete inquisitiva, evita los comentarios de "tu ex se enrolló con no se quién", no quieras saber nada, eso ya no es asunto tuyo. Si tienes que dejar de ver a ciertas personas, pues lo haces, si son amigos lo entenderán, sino, nunca lo fueron.
5.- Conviértete en tu muy mejor amiga. En este tiempo es normal replegarse con los colegas y sentir su apoyo y cariño, ampliar el círculo de amistades incluso, pero una manera de saber que eres coherente y que no la estas cagando demasiado es ver las cosas desde fuera: si lo que estoy haciendo lo hiciese mi amiga MariPili... qué la diría?. Evítate pillarte un pedo descomunal (el alcohol además de oxidarte, es depresor del sistema nervioso central, al principio puede darte la risa, pero a la larga te sentirás más triste si cabe) y empújate a hacer cosas positivas, incluso desafiantes. Seguramente hay muchas cosas que te gustan hacer y no lo sabes, así que prueba, porque lo mismo eres un genio haciendo sushi o tienes un don para escalar montañas, y encima te gusta y tú ahí sentada sin saberlo, seguro que muchas te hacen sentir mejor contigo misma. Intenta marcarte una lista de nuevas actividades e intenta cumplirla.
6.-Ten citas contigo misma. Los psicólogos alemanes dicen que uno no debería tener una cita hasta transcurrido 3 veces el tiempo invertido en una relación... se te puede ir media vida en eso. Los psicólogos afirman que los duelos y eventos traumáticos se superan mejor con el apoyo de amigos cercanos y redes sociales sanas que nos apoyen, y secundo esto. Lo más sensato es que uno tenga citas cuando vea que su vida es estable y buena y las tiene porque le apetece y no por dependencia o por asunción a la soledad propia. Pero tú mereces la pena. Y uno tiene que aprender eso también. Una manera interesante de superar el mono de citas es crearte tiempo propio de calidad, ese que antes no tenías porque se lo dedicabas a tu ex. Si con una pareja irías al cine, porque no vas al cine sola? Puedes elegir la película que quieras y comerte todas las palomitas sin complejos. O ir a ese restaurante que siempre has querido. O darte un baño de burbujas largo, ese para el que nunca tienes tiempo, comprarte ropa (exterior o interior) para tu propio deleite... Si alguien te dice "qué triste, irse a los sitios solo", pensadlo, no es ponerse un vaquero e irse al cine, es tener un cita: ponerte guapo porque quedas contigo mismo y quieres ver tu mejor yo, hacer cosas que te gustan, darte un capricho... Si tú no pasas tiempo de calidad contigo mismo no valorarás lo que vales, si no lo valoras, es dificil que te valores ante los demás. Cuando tienes citas estupendas te das cuenta entre la diferencia entre soltería y soledad. Además, seguro que antes ibas por el mundo sin mirar a tu alrededor ni ver un montón de cosas, es momento de reconceptualizarlo todo.
7.- Clean up time. No es recomendable tirar cosas del ex según termina la relación, en caliente, mejor es meterlo todo en una caja y esconderlo y luego sacarlo en frío, con la conciencia más calmada y valorando qué te aporta y que no cada cosa. Hay cosas que se deben guardar y otras que no, luego cuando las ves, te crean una perspectiva interesante y menos autodestructiva. Si lo que te muestran esas cosas no te hace crecer o no muestra un claro aprendizaje, si te causa dolor gratuito o si, simplemente, ya no te las crees, fuera, sólo ocupan espacio. Es tan importante tener las cosas que uno quiere, como deshacerse de lo que no aporta nada. Ponte en plan diosa Khali, es importante destruir para poder crear, porque la destrucción sabia implica renovación.
8.- Llegado el momento, ten al menos una cita con una persona con la que no saldrías. Esto aparecía en un artículo de una página que siempre os recomiendo de Hello Giggles, una página feminista y muy friki. Creedme que me vi en una de estas antes de estar preparada para una cita, y que de hecho, no se puede considerar ni cita, pero a nivel interno, lo tome como aprendizaje. Después de pasar por todos estos estadios, tú no eres la misma, la gente con la que no saldrías puede aportarte puntos de vista interesantes, puede enseñarte cosas, puede incluso que te señale cosas que no sabías que necesitabas, pero las necesitas, o que debes librarte de cosas que no necesitas y pensabas que sí. Una cita implica pasar tiempo, no crear esperanzas, dar espectativas ni dejar que te coman la boca, así que como experiencia siempre es interesante, pero no dejes que la otra persona caiga en equívocos.
9.- Cuando encuentres a una persona que te interese, ten "NO citas". Las citas con otros siempre tiene un punto de estrés, porque no controlas tú sola lo que va a pasar, ya depende de otro. Pero salir sin compromiso, simplemente por salir y compartir tiempo de charla y pasarlo bien, sin estar pendiente de ir a un sitio mono o no poder pedir una hamburguesa tres quesos (esto me ha pasado, conste) de esas que tienes que desencajar la mandibula cual boa constrictor para engullirla (vergüenza para mi vaca) esta guay. No es perder el glamour, es evitar el rollo "todo tiene que ser perfecto". La perfección es aburrida, es superficial y antinatural la mayor parte de las veces, a veces reirse tranquilamente de lo cotidiano crea perfección no buscada, es muy mágico. Buscad situaciones naturales donde sentiros bien con la persona en cuestión, quita hierro y se acerca a la realidad, que es con la que vais a convivir si todo sigue adelante, así se aprende también a hacer especial lo cotidiano.
10.- Si quieres enamorarte, te mereces enamorarte: recuérdalo. A veces uno cree que por llegar a una edad tiene que "apañarse con lo que haya" y que los príncipes y princesas no existen... y ni lo uno, ni lo otro. Nos han vendido que el fracaso es estar solo, pero es mayor fracaso permanecer con una persona que no te llena como necesitas a la que estas robando tiempo para ser feliz, porque también lo merece, que estar soltera y ser tremendamente feliz con ello. Nunca sabes cuando puede llegar la persona que te deje con la boca abierta sin pretenderlo, que te llene de felicidad o que te haga cantar
good morning a lo Gene Kelly todas las mañanas. Las medias naranjas no existen y de las personas que nos pueden hacer feliz a veces no nos separa el espacio, sino el tiempo. Así que sed generosos.
Como siempre os animo a que dejéis vuestros briconsejos en comentarios, seguro que pueden ayudar. Y a los que estéis en este punto, mucho ánimo de corazón.