domingo, 24 de junio de 2018

Look de uñas: strawberry milshake and spiced vanilla. Descubrimientos de la vitamina D




La laca Cupcake de Kiko en el tono 648 siempre queda bien con rositas, como el Ballerina Pink, y es genial para cuando, como ayer fue el caso, no quiere currarte nada porque literalmente te mueres muy fuerte de gastroenteritis.

Secreto para los que no estudiaron biología en el instituto: respiran tus mitocondrias, con los pulmones ventilas!

Esta semana he estado leyendo muchos artículos maravillosos sobre la vitamina D y si mi orgánulo celular favorito es, obviamente, la mitocondria (que sé que es de básicas, pero es que es como ser fan de Madonna, sabes que siempre se reinventa), mi vitamina favorita es la D, porque es como una youtuber mal gestionada de las vitaminas: tiene algo de fama, pero si sigues su canal te das cuenta de que tiene una función social importantísima y no tiene promoción.

Hay que distinguir dos tipos de vitamina D, la D2, o ergocalciferol que viene de la dieta y la D3 o colecalciferol, que viene de la toma del sol. Creo que todos sabemos que la falta de esta vitamina produce el famoso raquitismo con el que nos amenazaban las madres si no nos comíamos la verdura del plato (bueno, puede que sólo fuese a mi, pero lo dudo). La cosa es que la vitamina D se ha estudiado que tiene acción en dos de las enfermedades que más están castigando nuestra sociedad.

Por un lado se ha visto gracias a un estudio de la Universidad de San Diego a 903 personas (que es un rango de estudio nada desdeñable) durante 2 años (1997-1999) que bajos niveles de vitamina D pueden estar relacionados con el desarrollo de diabetes o pre-diabetes. En niveles de 30 nanogramos por mililitro, 10 menos que lo aconsejado, se han visto que se disparan estos niveles de riesgo de manera alarmante, tanto para vitamina D por ingesta como por exposición solar.

Por otro lado, la de estudios que tiene Science Daily  de distintos estudios sobre la vitamina D y su acción contra distintos tipos de cánceres es para echarse un agradable ratito de lectura: disminuye el riesgo a cáncer de pecho (sobre todo en el sector de 55-63 años, es decir, menopáusico o postmenopáusico) y mejora su tratamiento, en cáncer colorectal y páncreas es increible la acción que tiene esta vitamina como protectora, así como en pulmones, vejiga, ovario, mielomas múltiples (en un tipo de células óseas) y leucemia en adultos. Además funciona bien en tratamientos antienvejecimiento.

Obviamente, hay que medir para no entrar en hipervitaminosis, porque lógicamente si andar bajo límites es malo, sobrelimitarse, muy bueno, tampoco es. La hipervitaminosis de vitamina D genera sensibilidad al sol y multiplica la posibilidad de un melanoma y en menores, malformaciones cerebrales, bipolaridad y obesidad infantil, anorexia (pérdida de apetito), vómitos e incluso daños renales.

Pero no nos pongamos catastróficos. Lo que intento decir que es que pocas veces sabemos porqué los médicos nos dicen que hagamos ciertas cosas, o no promocionan otras. Nos dicen que es bueno tomar unos 15 minutos al día el sol, con protección y nos dicen que es bueno para la vitamina D, para que sea el "pegamento" del calcio en los huesos, pero no nos dicen que además nos puede estar salvando de varios tipos de cáncer, que es una gran razón para animarse. Y no nos lo dicen porque no queda claro cómo hace la vitamina D para controlar los procesos por los que controla el cáncer, que es lo más alucinante de todo (y por lo que me pirra la biología celular).

La cosa es que se sospecha, que es a la conclusión que llego tras leer muchos estudios, porque no hay un consenso del colectivo médico ni estudioso, que la vitamina D es una especie de Soy una Pringada de las células cancerígenas. ¿Os acordáis (sí, sé que a Adaldrida le va a dar mal cuerpo recordar esto) cuando Soy una Pringada dice cosas tipo  "tu vida es un asco, o te reinventas o te suicidas"? Pues la vitamina D es casi lo mismo para las células cancerosas, sólo que las convence de que nunca serán células Kardashian, ni células Spears, ni nada de eso y claro, para no ser tan maravillosa, pues mira chica, muerete. Esto se llama acción inmunomoduladora y la vitamina D es responsable, lo cual es una manera de limitar tumores y cánceres reduciendo el uso de terapias más agresivas y actuando desde la prevención, lo cual no sólo es muy positivo, sino que resulta fascinante y puede animar a mucha gente a invertir en el estudio de esta mágica vitamina que tanto tiene que aportar a la ciencia.

¿Qué os parecen estos descubrimientos? ¿los sabíais?  ¿Sois de leer páginas de estudios científicos? Contadme cosillas en comentarios.

3 comentarios:

Noelia Cano dijo...

Me gusta leer estudios pero sobre todo de psicología o alimentación (te recomiendo el blog de lo que dice la ciencia sobre adelgazar que no es de adelgazar y sí de desmentir bulos sobre la alimentación). Muy interesante tu aporte.
Y muy chachi tu manicura.
Buen comienzo de semana, guapetona.

Adaldrida dijo...

Eres absolutamente genial y para las células cancerígenas no me importa que hubiera 1000 ejemplares de soy una pringada

Beatriz MissPotingues dijo...

La Vitamina D3 es una gran aliada para muchas cosas. Si nosponemos, no acabamos.
Besos!