Con tres capas del Crashed the Party tenemos la uña casi opaca. Otra cosa curiosa es que si lo pones con algo pastel sale siempre algo que podría conceptualmente estar relacionado con un muñeco Mattel... verdad como un templo. La otra laca es poco feminista, así que para qué...
Marzo ha sido un mes tibio en cuanto a compras y testeos, pero aún así trae alguna novedad y alguna crítica que quería compartir, por si son útiles.
-Jabon
facial para pieles sensibles de Bonté. Sobre este producto que compré al tuntun y se ha
convertido en mi jabón facial favorito por lo bien que me deja los poros
y que os reseñé con intensidad aquí, sólo tengo una queja: lo están
descatalogando. Así que mi intención ante esta situación es comprar
todos los botes que vea, que no sé si quedarán en la tienda. El otro
día, hablando con la dependienta de la tienda -que mira que no suelo yo
de pararme a hablar pero aquí son majas, creo que por las veces que me
he solidarizado con su causa- y le decía la gracia que me hace que
eliminen una línea que funciona tan bien con las pieles reactivas y ella
me respondía "no sé porque quitan algo que funciona, porque la gente
nos lo dice mucho". Dicho queda, señores del Clarel: escuchen a sus
clientes, si algo se acaba es porque gusta.
-Spray antioxidante con baya de acai de
Ziaja. Segundo spray que uso y la verdad, me gusta mucho porque
primero, aunque no soy de tónicos da muy buena textura a la piel,
segundo porque no soy de tónicos post lavado de cara matutino (lo sé,
mal por mi) y es salir de la ducha, me lo echo y me olvido. Ha
simplificado la rutina de limpieza muchísimo. Lo malo? Lo cuento en
comprados.
-Exfoliante
de mango. No me ha durado mucho este producto, pero me ha gustado
mucho, además conjunta con la crema de mango de Cien y me encanta la
textura tan rica y contundente que tiene, pero también el grano
azucarado, que es mi textura favorita para el cuerpo. Como exfoliante,
normalito, pero el olor es muy rico y no es persistente y la sensación
gustosa. Repito.
-Acondicionador
leche de cabra Ziaja. Ni idea de cuantas botellitas he gastado de este
producto, huele bastante menos que el champú y el resultado es muy
positivo, casi no he usado plancha este año y con un secador de pelo que
tengo del año pasado, que tiene más potencia, con menos calor, no tengo
ni una sola punta abierta. Todo cuenta.
-2
placas de impresión de nail art. Las compras compulsivas del mes, muy
chulas, en plantillas con forma de mariposa de plástico blanco que no las saco porque directamente no hay manera de ver bien los dibujos en foto (ya cuesta en la vida real, con eso os digo todo), prometo ir avisando cuando saque dibujos de estas.
-Mascarilla
Limoncello de Bonté. Otra que tal, que no se ve y que cuando tengo la
piel con mucho acné, me regula la vida. Se supone que sólo es para
refrescar, y tiene olor a relleno de las galletas de limón de Cuétara...
pero a mi me vale. Decepcionada porque me iba fenomenal...
-Abrillantador
de uñas. Prefiero los de tacos de 4 caras, porque las partes de
exfoliación son mejores: mis uñas tienden, imagino que por el esmalte,
que a lo mejor no es por eso, la manía de estriarse, cuando me quito el
esmalte, queda un poco feo lo de las estrías, así que directamente las
pulo y quedan mucho más bonitas cuando las desmaquillo.
-Crema de manos de Caléndula de Lidl. He gastado un bote, que me compré ochopocientos y bueno, que la voy a seguir gastando. Os dejo este post por si no lo habéis leído aún.
-Jabón
facial para pieles sensibles Bonté. Lo dicho, su composición, buena, su packaging, práctico,
su acción, muy eficaz con el uso combinado de un cepillito de cerdas
(porque no sé qué resultado dará otro tipo de cepillos tipo Foreo), su
precio, más que competitivo... no me lo explico, de verdad que no.
-Mascara
de pestañas High Definition de Basic Cosmetics. No tengo mucho tiempo para ir a por
cosméticos así que en vista de que me habían salido bien otros productos
de la marca, aposté por esta máscara de pestañas... Tiene buen aspecto,
no parece grumosa ni nada, pero huele mal fatal... y mucho. Por lo
demás, no noto que eleve las pestañas, ni las dé cuerpo, ni haga nada de
nada, solo las noto más negras, ya está. Es como si sólo las tiñese de negro, necesito un rizador para que tengan algo de cuerpo y tampoco lo mantiene mucho. Va a ir directa a la basura.
-Spray antioxidante con Baya de Acai
Ziaja. Está Adaldrida de testigo: llevo un par de meses buscando el
recambio de este producto, porque no había manera de encontrarlo en
tiendas y he mirado en los dos Primor de Fuencarral, en el de Islazul,
en el de Parquesur y en el Príncipe Pío. 5 Establecimientos y en 5 ni
encontré el acondicionador de pelo de Ziaja, ni este spray durante
semanas... En Gilgo, como están terminando con existencias, ni
reponen... y todo así. Al final volví a uno de los de Fuencarral y sólo
tenían uno de cada. Entre esto y lo que discutíamos el otro día en
redes con Rebeca, pero que también me di cuenta cuando fui la última vez
con Adaldrida (que es más bajita que yo y no accede a algunas partes de
stands, pero es que hay muchas dependientas de la tienda en su
situación) con su mala disposición de tiendas para personas de movilidad
reducida, personas grandes, personas bajitas, personas con carritos de
bebé... moverse en Primor sin tirar algo, sin tener dificultades y sin
que te sientas en una gymkana es complicado, por no mentar que en las
tiendas de dos pisos, si tienes silla de rueda, ahórrate el ver
productos capilares, colonias, productos de higiene masculina y femenina
y toda la parafarmacia. Están bastante centrados en copar los espacios
de productos, no reponer los productos que sí funcionan y petarlos con
novedades y no pensar en que las personas que vamos a una tienda
queremos disfrutar de la experiencia de la compra: el saludo de las
personas que trabajen ahí y la resolución de dudas, ver los
ingredientes, ver calidades y colores, tener una primera impresión de
contacto... si eso se enturbia con el hecho de saber que haces tapón en
un pasillo si te quedas mirando el producto tres segundos, de que si vas
como yo, tras el curro, con mi megabolso y una bolsa donde llevo el
ebook, una botella de agua, comida... y tiras algo al suelo al darte la
vuelta, que es imposible pasar con un carrito de bebé, una silla de
ruedas, muletas... Y sí, esta conformación es en todos los Primor que he
visto, que como veis, son unos pocos.
Mi
pregunta sigue siendo la misma: ¿cómo una distribución así ha podido
pasar un control de seguridad de desalojo contra incendio/ atentado/
inundación / Daddy Yanki? Qui'cir, tirar una caja al suelo, que alguien
tropiece y se caiga gente encima no me parece ni tan difícil ni tan
destartalado. Obviamente nos hicimos eco de la queja a Primor, que
encima suele dejar cajas en los pasillos con los productos a reponer,
pero no creo que estén en ello. Pero la queja en las redes, consta.
-Exfoliante
de frambuesa. Tirón de orejas para Gilgo. El exfoliante me gustó mucho,
y vi que quedaba otro de mango, pero cuando lo cogí, la tapa estaba
rota por el borde y llena de celofán, y puesta a la venta, que me dirás
tú lo comprometido que queda el producto... Vale que el producto no es
caro, pero oye, eso no se vende! Así que como el de café no me llamaba
me he llevado este que ni he probado. Ya os diré.
-Acondicionador
de leche de cabra de Ziaja. Lo dicho, se está potenciando mucho la
publicidad a la línea facial y la de pelo está desaparecida. Mal Ziaja,
porque las cremas faciales no pensaba comprarlas y así penalizas a las
compradoras fieles a productos en concreto (y no sólo lo uso yo, lo usa
Darcy también...).
El cambio de hora me ha hecho adelantarme. Algún favorito?