El rango de edad como punta del iceberg

Hace poco os hablaba de como he sido discriminada por varios idiotas (gracias a Thor) por un estúpido rango de edad, pero es que he visto que se ha creado un feedback fabuloso en varias redes sociales, porque este blog tiene pocos comentarios (NO NOS MIRES, ÚNETE… si quieres…), pero tiene mucho mundo detrás.

La cosa es que la mayoría que me habéis comentado sobre el asunto, me habéis hablado de otros rangos de discriminación, o la extrapolación de este mismo rango de edad en otros ámbitos. Uno curioso es como una amiga, por tener una edad la discriminaron porque en una entrevista consideraron que si no tienes hijos con 35, tu reloj biológico te va hacer que, cual frívola protagonista de cierto anuncio de Desigual, le pinches los condones a tu pareja (todo muy maduro, oiga) y no la contrataron por eso, porque se pondría a tener hijos cual loca, según su idea.

Explícame esa teoría de la bomba biológica maternal, que me interesa mucho...

Basados en esa idea, en EE.UU. muchas empresas han ofrecido la “oportunidad” a sus empleadas de congelar sus óvulos y postergar la maternidad hasta cuando quieran para “romper el techo de cristal”… perdonadme la expresión, pero p*t*s genios. Un techo de cristal se rompe obligando a los padres a tomar bajas de paternidad e implicándoles en la crianza de los menores de manera activa, de manera que no se te pueda discriminar por ser mujer y tener hijos, un hombre también podría darse de baja. Un techo de cristal se rompe cuando das ayudas a la maternidad, ayudas a la conciliación familiar y facilidades para guarderías.  El techo de cristal se rompe cuando, de verdad, una mujer no tiene que hacer el triple que un hombre para demostrar que está capacitada para hacer algo.

Así que, que una empresa te dé la posibilidad de congelar tus óvulos para que te dediques durante el tiempo que estimes a tu carrera, dejando la casi menopausia para la crianza de los hijos, a parte de excesivo y abusivo, es peligroso y poco sano (tanto física, como mentalmente). Sólo faltaba que nos dijeran cuando tenemos que trabajar y cuando parir (que no somos vacas, leñe).

Si acaso, vacas muy sensuales, oiga...

Otro rango es la apariencia y el peso… reconozcámoslo pero nos han vendido una obligatoriedad en la apariencia, entrar en unos standards. Ser guapo no es fácil, ser aparentemente guapo es igual de difícil, pero además muy esforzado… todos tenemos nuestras obvias preferencias, pero hace poco vi un vídeo importante sobre como una chica delgada y bonita era maquillada para parecer mucho más gorda y aparecer en citas concertadas por páginas de internet (estoy preparando un post sobre estas páginas, si quieres mandarme tu historia, buena o mala, puedes hacerlo a titahellen81@hotmail.com). A un chico le hicieron lo mismo. El resultado: las chicas al ver que el tío, incluso las troleaba un poco, decidían en algunos casos, volver a quedar con él, porque se lo pasaron bien y la apariencia no les resultaba un condicionante. Los hombres fueron bruscos con ella: la dejaron tirada, la hicieron sentirse mal porque “les había mentido” (seguro que ellos dijeron que eran sensibles y mirad la sensibilidad nula que demostraron)… sólo un chico se quedó hasta el final y fue amable. Ojo, amable.

No contentos con esto hay otro vídeo, el de una chica que finge estar borracha para ver si quedan buenos samaritanos... miedo no, lo siguiente... pero esto no es discriminación, esto es ser una malísima clase de humanoide...

Amigos, Han no lo haría, porque eso es lo que hacen los hombres de verdad.

Son tantas cosas, que es imposible indignarse, pero lo importante es que cada vez hay más gente que detecta estos movimientos tan injustos y los rechaza, educa a los menores en la igualdad y hace de su mundo un lugar más justo.

Al fin y al cabo, una hogaza de pan está hecha de muchas miguitas. Espero hacer pronto post con casos más positivos y menos criticones.