domingo, 29 de noviembre de 2015

Look de Uñas: Monsieur Dior y doña Adaldrida y las gracias del jengibre




La semana pasada Adaldrida me donó un esmalte de Dior, el Pied- De- Poule, que era muy ella, es uno de esos nudes elegantes, medio topo clarito, medio marfil oscuro. "No le doy uso" me dijo. Y no lo entendía, porque es muy Adaldrida, de hecho, este post es contrato de usufructo: si te arrepientes, que sepas que este Dior puede volver a tus brazos cuando lo desees, yo lo tengo de momento en acogida. Quizá esta decisión viene motivada  porque Adaldrida está en fase navideña: mucho oro, mucho rojo brillante, mucha plata purpurinosa, mucho verde pino metalizado, alegría luminosa... Adaldrida es un poco los colores de la navidad. Y el rosa y el melocotón. A nadie le quedan los rosas como a ella, pero nadie ama más el melocotón que ella (que yo conozca). Un color la ama y otro recibe su amor. Así que he decidido hacer este look muy Adaldrida, con el duo cromo DC01 de Flormar, un dorado con reflejos rosados. Es que encajan, como Adaldrida con sus labiales rosas. Son cosas que van juntas y funcionan. De esas cosas que sabes que deberían conocerse, encontrarse y disfrutarse, porque han nacido para ello. Como Christian (Dior, no Grey) y Adaldrida, dos amantes del arte, que me han dado esta idea, la elegancia de Dior y su sentido del arte con el carácter rechispeante de Adaldrida en una manicura francesa reinventada. Me los imagino hablando de los trajes de Dior para sus "mujeres flor" (a Christian le gustaban las mujeres de mucha curva, por eso hacia grandes faldas abombadas) y sus perfumes (algunos dedicados a Catherine, su hermana, que luchó en la Resistance Francesa mientras Christian era su tapadera vistíendo a las mujeres de los altos militares nazis) mientras se toman un café bombón (un día es un día).

Por cierto, que mientras paseábamos la semana pasada por la planta alta del Hema le conté que iba a experimentar con el jengibre, porque me he comprado una bolsita en polvo y pensaba usarla en la mascarilla de arcilla verde. Y voy a escribir sobre mis impresiones, tal y como ella me animó. Además llevo unas semanas de temática intensa, así nos relajamos con experimentos varios.


Primero comentaros que el Jengibre, o zingiber officiale (que se note que nos lo hemos currado) es una plantita de las zingiberáceas con sustancias buenísimas para el organismo como el triptofano (ayuda a producir la hormona de la felicidad y ayuda a dormir y a regular los ciclos circadianos), arginina (ayuda al sistema inmune, contra la impotencia y contra las hemorragias, varices y hemorroides), entre otras muchas, vitamina C por un tubo, minerales a tutiplen (aluminio, cromo, manganeso, boro, cobalto, fósforo, silicio y zinc) y un montón de sustacias que ya en la antigua Roma, ayudaban a las gentes a cuidar de su salud. 

En tisanas ayuda a mejorar las digestiones pesadas, mejora el aliento, elimina los gases, estimula las enzimas estomacales y es un antibiótico natural, además de ser un antivomitivo natural, lo que vale en viajes e incluso, lo recomiendan con sensatez en los embarazos (tampoco es cuestión de echarle jengibre a todo), incluso para paliar los vómitos de la quimio y ayudar en las diarreas (cuando tienes una descomposicion que más que un médico necesitas un exorcista). Ayuda al corazón, previniendo problemas coronarios y elimina los dolores de garganta y las congestiones de resfriados y gripes. Y su aceite ayuda en los dolores musculares y de artritis. Incluso, si tomas días antes de que te baje la mentruación, unas tazas, disminuye los dolores (durante la regla puede hacer que sean más fuerte y hay riesgo de menorrea -reglas abundantes y dolorosas- ), así que unos días antes, una infusión con miel y limón (porque su sabor tampoco es francamente delicioso en infusión solo).


Dicen que también es un fuerte afrodisiaco... yo no he notado nada nuevo. Como decía Isabel Allende, el único afrodisiaco que funciona 100% es el amor.

Como es un antibacteriano potente, se me ocurrió ¿y porqué no añadirlo a la mascarilla? Y quiero comentaros mis impresiones. 

En los usos que le he dado, he quitado la harina de arroz (afina el poro y sirve de exfoliante natural) y he simplificado el proceso, una cucharada sopera de arcilla verde, media cucharadita de polvo de jengibre (NO MÁS!), una gota de aceite de árbol de té (que también es antibacteriano, por lo que no necesitaremos más) y agua hasta conseguir la consistencia deseada. El aspecto es como un poco cenagoso, porque el jengibre no es un polvo como la arcilla, homogéneo, tiene pequeñas ramitas de la corteza de la raíz y no es fino y perfecto, pero tampoco vale para exfoliar, sólo da un aspecto menos pulcro a la mezcla, pero vamos, que podemos vivir con ello.

Hace un ginger ale?

Lo primero que os diré es que el jengibre es como la canela en polvo, es un poco picante, así que al aplicarlo en la cara notaréis un cierto efecto "calor" natural. Por eso digo que no más que media cucharadita de café de este producto, sobre todo si sois de rostro sensible. El olor no es especialmente fuerte ni diferente y sólo notaréis calorcillo, que ayudará a que el poro se abra y se limpie mejor. Eso sí, es muy probable que al retirarlo con agua, esta sensación de calor, aumente, como cuando comes algo picante y bebes agua, no se apaga el calor, pero nada que un tónico y una crema hidratante no eliminen (en serio, se va rápidamente) . A una piel muy sensible, le diría que no probase con él, o si está muy mal, con cantidades inferiores a la media cucharita. Puede ayudarse con un tónico de aloe vera o manzanilla posterior, porque puede ser muy útil para calmar la sensación de calor. No es una sensación de quemazón, pero en una piel sensible puede ser un poco más intensa que en mi piel (ya sensible per se). A una piel seca no lo recomendaría, la mascarilla te seca mucho los granos y un poco la piel, importante sí o sí, la hidratante posterior.

El resultado es, tras una semana de desquicio hormonal, la piel más limpia que he tenido en meses. Obviamente beber líquido y hacer cardio ayuda, más un equilibrio en limpieza y potis, y una alimentación pobre en basura y rica en frutitas y verduritas, porque todo cuenta, pero es un producto que me ha asombrado, aunque es posible que en verano no lo use, por el calor, pero en general, me ha gustado.


El jengibre en polvo se vende en herboristerías, y es bastante fácil de encontrar, a mi una bolsita me ha costado sobre los 2 euros y lo puedes usar en tisanas (por cada cuarto de litro dos cucharaditas de café, se puede servir con limón y miel) o en hacer pan de jengibre para hacer figuritas de hombres o casitas, que ahora se llevan mucho. Cunde mucho porque hay que añadir poco en todo, ya que tiene un potente sabor, como veis.

Y poco más, habíais probado el jengibre?

5 comentarios:

Noelia Cano dijo...

Me gusta mucho el jengibre en repostería e infusiones, pero no lo había probado en mascarillas y me parece super interesante.
La manicura es efectivamente, muy Adaldrida y cómo no, preciosa.
BESOS!

Adaldrida dijo...

Me estoy poniendo colorada. Gracias por la manicura, es muy yo gracias a la francesa dorada. Te voy a dedicar mi primera manicura de Adviento.

Beatriz MissPotingues dijo...

Adoro el jengibre. Me encanta en las infusiones y en comidas.
No creo que pruebe en mascarila,proque mipiel no lo soportaría, pero me ha parecido interesante.
Besos!

burbujitabebe dijo...

A mi me aburrió tanto el jengibre en mi época de vómitos de embarazada jajajaja!
Me encanta lo de la acogida del esmalte, yo sería más de santa Rita Rita... :D
Besitos guapa!

www.eldiariodeshyris.blogspot.com

Angie dijo...

Adopta no compres! Besotes!