Te voy a contar una pequeña fábula china mazo de antigua, un poquito adaptada: En un pueblo pequeño, de pocos habitantes, la mayoría campesino, vivía el anciano maestro Li. Sus flores eran las más hermosas y su campo, el más cuidado, pero su orgullo era su hijo, Fukian. Un día, un hombre rico, asombrado por la fuerza de Fukian, decidió contratarlo por una pasta para que lo escoltara por las montañas. El pueblo entero aplaudió su decisión y felicitó al maestro Li por su buena suerte. Él se limitó a responder "buena suerte, mala suerte, ¿quién sabe?". Dos semanas después volvió Fukian. Había sido herido en su viaje de vuelta y tenía una pierna rota. El pueblo al completo se compadeció de la mala suerte de Fukian y Li. El maestro se limitó a decir "buena suerte, mala suerte, ¿quién sabe?". Tres días después pasaron los soldados del señor Cao Cao y alistaron a la fuerza a todos los jóvenes del pueblo excepto a Fukian, que seguía convaleciente. Una vez más el pueblo alavó la buena suerte de Li y su hijo. Y bueno... ya te imaginas cómo sigue la historia. Así que ánimo, con lo que sea, por lo que sea y para lo que sea. Nunca llueve eternamente y a veces las cosas más terribles tienen un sentido que en el momento se nos escapa, pero con el tiempo descubrimos que fue para bien. Un abrazo tocho, metafórico pero igualmente lleno de cariño, y ya sabes: Cualquier cosa en la que podamos ayudar, por aquí estamos.
Lo entendemos, pero yo, a diferencia de Miss Potingues y como estoy pero no estoy (ando por Cádiz y me conecto a ratos y dándome panzadas con los blogs) no me entero de qué va el rollo.Sabes dónde estoy y sabes que puedes contar conmigo. Un abrazo, un beso y un mami-achuchón.
8 comentarios:
Caxis... animate que estar así no es bueno pal cuerpo!
Yo estaré aqui mordiendome las uñas esperando tu proxima entrada, que me encanta leerte!
Anímate guapa!
D*
¡Anímate guapa! Espero leerte otro día que estés con más ganas :)
:*
Imagino por dónde van los tiros.
Ánimo y espero que mañana sea mejor.
besos!
Pase lo que pase ánimo.
Y no te preocupespor el post, que ya sabes que yo soy la reina de la negatividad y de vez en cuando me dan aires.
Te voy a contar una pequeña fábula china mazo de antigua, un poquito adaptada:
En un pueblo pequeño, de pocos habitantes, la mayoría campesino, vivía el anciano maestro Li. Sus flores eran las más hermosas y su campo, el más cuidado, pero su orgullo era su hijo, Fukian.
Un día, un hombre rico, asombrado por la fuerza de Fukian, decidió contratarlo por una pasta para que lo escoltara por las montañas. El pueblo entero aplaudió su decisión y felicitó al maestro Li por su buena suerte. Él se limitó a responder "buena suerte, mala suerte, ¿quién sabe?".
Dos semanas después volvió Fukian. Había sido herido en su viaje de vuelta y tenía una pierna rota. El pueblo al completo se compadeció de la mala suerte de Fukian y Li. El maestro se limitó a decir "buena suerte, mala suerte, ¿quién sabe?".
Tres días después pasaron los soldados del señor Cao Cao y alistaron a la fuerza a todos los jóvenes del pueblo excepto a Fukian, que seguía convaleciente. Una vez más el pueblo alavó la buena suerte de Li y su hijo.
Y bueno... ya te imaginas cómo sigue la historia. Así que ánimo, con lo que sea, por lo que sea y para lo que sea. Nunca llueve eternamente y a veces las cosas más terribles tienen un sentido que en el momento se nos escapa, pero con el tiempo descubrimos que fue para bien.
Un abrazo tocho, metafórico pero igualmente lleno de cariño, y ya sabes: Cualquier cosa en la que podamos ayudar, por aquí estamos.
Brujiiiiiiiiiiiiiiiii!! ánimo!!!!!! no te me achuchurries... besotes brujiles!!!!!
Lo entendemos, pero yo, a diferencia de Miss Potingues y como estoy pero no estoy (ando por Cádiz y me conecto a ratos y dándome panzadas con los blogs) no me entero de qué va el rollo.Sabes dónde estoy y sabes que puedes contar conmigo. Un abrazo, un beso y un mami-achuchón.
Gracias Dangie, con el tiempo todo pasa, no? Besotes
Si, yo también quiero pasar pronto por esto Irene. Besotes
Gracias Miss, me imagino que viendo el face te habras olido la tostada. Besis
Gracias solete. Un beso muy grande.
Si, la verdad es que el cuento pega, veremos que clase de suerte me depara. Gracias mil Rafa.
Intentaré achuchurriarme lo menos posible, muchas gracias amor. Besotes.
Gracias Gadi, si algo me sienta bien son los achuchones. besotes
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